Las modalidades del mensaje son las diferentes maneras en que modulamos el enunciado en función de los diversos factores (tiempo, razón, intención) que intervienen al momento de comunicar algo. Tales modulaciones, que afectan las estructuras temática e informativa (soporte tema, soporte marco, aporte; dado, nuevo), son el resultado de operaciones morfosintácticas de mayor o menor complejidad, como: la pasivización, la extraposición (o dislocación), la hendidura, la impersonalización, la negación y la nominalización.
La pasivización
Si observamos un enunciado pasivo desde el ángulo de la sintaxis, podemos decir -aunque esto, como veremos, es cuestionable- que el objeto directo (de la construcción activa) se ha convertido en sujeto, y que el sujeto de dicha construcción se ha transformado en un sintagma preposicional, encabezado por la preposición "por".
Los niños rompieron la lámpara → la lámpara fue rota por los niños.
El hecho de que una oración activa, siempre o casi siempre, pueda transformarse en pasiva no implica, en nuestra opinión, que esta última se deriva necesariamente de aquélla. En efecto, con el mismo criterio, podríamos decir -cosa que nunca se hace- que una oración en construcción activa es el resultado de la transformación de otra, de construcción pasiva, ya que también esta manipulación siempre es posible.
Desde el punto de vista de la estructura semántica, los enunciados pasivos suelen describirse como una 'inversión de papeles semánticos', en el sentido de que al participante correspondiente a la función paciente/objeto afectado/objeto efectuado se le asigna el papel agente, y que el otro participante, originalmente agente, asume el rol paciente. Resulta evidente que tal descripción no es otra cosa que la transposición, en la estructura semántica del enunciado, de la transformación sintáctica vista anteriormente, lo cual no esclarece en absoluto la cuestión. Si bien es cierto que tanto el sujeto (en el plano sintáctico) como el agente (en el plano semántico) tienden a colocarse en posición inicial, nada impide que los encontremos en otras porciones del enunciado. Además, no está demostrado que la construcción activa sea preexistente a la pasiva, ni viceversa.
Desde la perspectiva de las estructuras temática e informativa, la cuestión de la oposición activa / pasiva tiende a destrabarse, ya que en ellas, más allá de los mecanismos sintácticos y semánticos ya aludidos, operan factores inherentes al dinamismo comunicativo, que determinan preferencias e incluso imponen ciertos y determinados esquemas en cuanto al orden de presentación de los constituyentes del enunciado. En tal sentido, la construcción pasiva permite, en ciertos tipos de discurso, establecer un 'doble enlace' dentro del enunciado o entre varios de ellos (Alloa, 1998: 49-50), por ejemplo:
Aquella tarde, encontró sobre la cómoda una carta que había sido escrita el día anterior por su marido, el cual no se atrevía a comunicarle personalmente que se marchaba.
Otra posibilidad sintáctica de establecer un doble enlace referencial es la proporcionada por la anticipación de uno de los elementos del sintagma verbal de la construcción activa y la consiguiente extraposición del sintagma nominal sujeto:
Aquella tarde, encontró una carta sobre la cómoda. La había escrito el día anterior su marido, el cual no se atrevía a comunicarle personalmente que se marchaba.
Si, por la razón que fuese, después de "carta", decidiéramos optar por una construcción activa como: que su marido había escrito el día anterior, no podríamos finalizar el enunciado con la subordinada adjetiva el cual... que se marchaba, que, por su carácter de información nueva, hemos colocado al final del enunciado. Si bien, ni sintáctica ni semánticamente, nada nos impediría hacerlo, el desplazamiento sintáctico del sintagma su marido y el consiguiente cambio de posición de la segunda subordinada adjetiva, implicaría que el contenido informativo de ésta perdiera su carácter de 'nuevo' para adquirir el de 'dado'.
Otro factor que puede favorecer la elección del giro pasivo en situaciones dialógicas es el 'condicionamiento sintáctico', el cual funciona como una suerte de anzuelo para el interlocutor. Éste, dejándose influenciar por el turno de habla que antecede al suyo -especialmente si el enunciado se presenta como pregunta-, emplea nuevamente el mismo giro, o sea, en este caso, el giro pasivo. Ejemplo:
- ¿Por quién fue realizado el proyecto?
- (El proyecto) fue realizado por un grupo de estudiantes.
Por último, es preciso señalar que el sintagma preposicional agente puede no aparecer en el enunciado. Las razones de tal ocultamiento son múltiples: el referente al que le cabe la función agente es específico; el agente es inespecífico (alguien, la gente, etc.) e incluso no sé sabe quién es; se conoce la identidad del agente pero no se considera necesario mencionarlo; por ser recuperable del contexto; por tratarse de afirmaciones generalizadoras; dar relieve al resto de lo expresado en el enunciado; por cortesía o para no responsabilizar a nadie, etc. Ejemplos:
La ley acabó siendo proclamada varios años después. (agente específico: los parlamentarios)
Su padre es respetado en todas partes. (agente inespecífico)
A su regreso al pueblo después de años de ausencia, nuestro personaje organizó una fiesta a la que todos fueron invitados. (agente recuperable)
Una vez reciclados, estos productos son vendidos en todo el país. (afirmación generalizadora)
El individuo fue acusado de haber matado a su mujer. (no se responsabiliza a nadie)
Las construcciones pasivas seudorreflejas
Encontramos a menudo enunciados a los que subyacen estructuras con ocultamiento del sintagma preposicional agente. De tal recesión de participante [ø] resulta que la función semántica 'paciente/objeto afectado/objeto efectuado' es asumida por el sintagma nominal sujeto. Este mecanismo morfosintáctico acarrea el empleo del morfema seudorreflejo "se". Ejemplos:
Este sistema evita que los muebles se abandonen en la calle... (El País, 14-10-96)
El autobús inteligente se estrena en otoño en seis céntricas líneas. (Ib.)
La versión española de esta obra, que se estrenó en Nueva York, a finales de los ochenta, se presenta ahora en el teatro Fígaro... (Ib.)
Por último, es preciso señalar que el sintagma preposicional agente puede no aparecer en el enunciado. Las razones de tal ocultamiento son múltiples: el referente al que le cabe la función agente es específico; el agente es inespecífico (alguien, la gente, etc.) e incluso no sé sabe quién es; se conoce la identidad del agente pero no se considera necesario mencionarlo; por ser recuperable del contexto; por tratarse de afirmaciones generalizadoras; dar relieve al resto de lo expresado en el enunciado; por cortesía o para no responsabilizar a nadie, etc. Ejemplos:
La ley acabó siendo proclamada varios años después. (agente específico: los parlamentarios)
Su padre es respetado en todas partes. (agente inespecífico)
A su regreso al pueblo después de años de ausencia, nuestro personaje organizó una fiesta a la que todos fueron invitados. (agente recuperable)
Una vez reciclados, estos productos son vendidos en todo el país. (afirmación generalizadora)
El individuo fue acusado de haber matado a su mujer. (no se responsabiliza a nadie)
Las construcciones pasivas seudorreflejas
Encontramos a menudo enunciados a los que subyacen estructuras con ocultamiento del sintagma preposicional agente. De tal recesión de participante [ø] resulta que la función semántica 'paciente/objeto afectado/objeto efectuado' es asumida por el sintagma nominal sujeto. Este mecanismo morfosintáctico acarrea el empleo del morfema seudorreflejo "se". Ejemplos:
Este sistema evita que los muebles se abandonen en la calle... (El País, 14-10-96)
El autobús inteligente se estrena en otoño en seis céntricas líneas. (Ib.)
La versión española de esta obra, que se estrenó en Nueva York, a finales de los ochenta, se presenta ahora en el teatro Fígaro... (Ib.)
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